Cinco razones por las que las APIs son esenciales para un sector financiero moderno

El sector financiero, ampliamente considerado como un creador de tendencias para las tecnologías nuevas y emergentes, está una vez más a la vanguardia. Con la puesta en marcha del Open Banking y el Open Finance en varios países, las entidades financieras marcan un hito en el uso de los datos de los clientes con su consentimiento, creando oportunidades de innovación y exigiendo al mismo tiempo planteamientos sólidos en materia de privacidad y seguridad. De acuerdo con un reporte de la Universidad de Cambridge, ya son 95 naciones las que avanzan en la implementación del Open Banking y Open Finance. 

El avance del sector también se ve en nuevas técnicas contra el lavado de dinero, la creación de soluciones de pagos en tiempo real y productos y servicios como finanzas embebidas. Lo anterior muestra la disposición de un sector por competir para ofrecer la mejor experiencia posible al cliente.

Todo esto es posible gracias a las interfaces de programación de aplicaciones (API). Las API son intermediarios basados en software que permiten a diferentes aplicaciones comunicarse y compartir datos de forma segura y eficiente. Esto no sólo crea un ecosistema financiero más "unido" para empresas y clientes, sino que también allana el camino para nuevos servicios, soluciones y casos de negocio innovadores. A continuación daremos cincos razones por las que las APIs se han convertido en una herramienta fundamental para un sector financiero moderno.

Son clave para la experiencia del cliente

Las APIs permiten que los bancos e instituciones financieras ofrezcan a sus clientes acceso rápido, fácil y seguro a productos y servicios. Según una encuesta de McKinsey, el 81% de las organizaciones considera que las APIs son una prioridad estratégica. Su capacidad para mejorar la conectividad y la personalización las convierte en un pilar de la experiencia bancaria moderna. ‍

Representan una nueva fuente de ingresos

Inicialmente, las APIs se percibían como una herramienta para reducir costos operativos. Sin embargo, hoy en día, su verdadero potencial está en la generación de ingresos. El caso más evidente es el de los pagos digitales, donde las APIs impulsan el desarrollo de ecosistemas de Open Finance. A pesar de esto, muchos bancos aún no han definido estrategias claras para monetizar sus APIs. Con un enfoque adecuado, estas interfaces pueden convertirse en un canal importante de rentabilidad.

Conoce más sobre los diferentes modelos de monetización de APIs, aquí.

Facilitan el desarrollo ágil y eficiente

En el desarrollo de herramientas y servicios bancarios, las APIs ayudan a evitar "reinventar la rueda". Estas interfaces ofrecen capacidades prediseñadas, como flujos de autorización o funciones de mensajería, que pueden integrarse directamente en nuevos proyectos. Esto no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también permite a los desarrolladores concentrarse en aspectos diferenciadores, en lugar de tareas repetitivas.

Garantizan transacciones seguras y confiables

En un sector donde la seguridad es primordial, las APIs desempeñan un rol crítico. Gracias a estándares robustos y enfoques de autenticación avanzados, las APIs aseguran que las transacciones sean confiables y seguras. Esto es esencial tanto para la banca en línea como para otras operaciones digitales, brindando tranquilidad tanto a los clientes como a las instituciones. Para el procesamiento de pagos en tiempo real en comercios o para los diferentes sistemas de pagos inmediatos como PIX, las APIs son la clave para lograr la interoperabilidad. Las API tienen condiciones de servicio y políticas de uso claras, que garantizan el uso adecuado de los datos y respetan la normativa sobre privacidad de datos.

Aprende cómo UK y Brasil implementaron el Open Finance, aquí.

Impulsan la conectividad en un ecosistema financiero digital

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La integración y conectividad son esenciales en el entorno financiero moderno. Las APIs permiten que las instituciones financieras se conecten con aplicaciones de terceros, herramientas analíticas y otras plataformas de manera rápida y eficiente. Esta capacidad de integración en tiempo real es crucial para ofrecer servicios innovadores, optimizar la toma de decisiones basada en datos y mantenerse competitivo en un mercado dinámico.

Las APIs no solo son una herramienta tecnológica; son un motor de innovación y crecimiento en el sector financiero. A medida que los bancos y otras instituciones adoptan estas interfaces, el potencial para transformar la experiencia del cliente, generar ingresos y mejorar la eficiencia operativa es ilimitado. En un mundo financiero cada vez más digital, las APIs no son solo una ventaja competitiva: son una necesidad.