Solicitudes y respuestas

En el universo de la tecnología, hay un elemento crucial que ayuda a distintos programas informáticos a chatear y compartir datos: se llama API, abreviatura de Application Programming Interface (interfaz de programación de aplicaciones). Hoy vamos a simplificar dos aspectos importantes de las API: Las solicitudes y las respuestas. Quédate conmigo y te explicaremos estos conceptos en términos sencillos y fáciles de entender.

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Solicitudes: La llamada digital a la puerta

Piense en las peticiones como una forma educada de llamar a una puerta digital. Cuando un programa quiere algo de otro, envía una petición. Del mismo modo que no entrarías en casa de alguien sin permiso, un programa no accede a los datos de otro programa ni los manipula sin antes pedir permiso mediante una solicitud.

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Métodos - El lenguaje de la acción

Para hacer una petición, se utiliza algo llamado método HTTP. Es como decirle al mundo digital qué tipo de acción quieres realizar. Éstos son los principales:

GET: Solicita información.

POST: Envía nueva información.

PUT: Actualiza la información existente.

DELETE: Elimina información.

URL - La dirección digital:

La URL es como una dirección digital. Indica dónde debe ir la solicitud y qué se pide. Al igual que la dirección de tu casa ayuda al repartidor de pizzas a encontrarte, la URL guía la solicitud al lugar correcto.

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Encabezados - Información adicional

Los encabezados (Headers) son como pequeñas notas adjuntas a la solicitud. Pueden decir cosas como: "Quiero la respuesta en este formato" o "Aquí está mi DNI para demostrar que debería recibir lo que pido".

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Cuerpo - Transportar la mercancía

A veces, tu petición necesita llevar algunas cosas. Esas cosas van en el cuerpo de la petición - es como el paquete que estás entregando. Suele utilizarse con peticiones POST o PUT.

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Respuestas: Abrir la puerta digital

Vale, has llamado a la puerta con tu petición. Ahora es el momento de que el otro programa responda. Esta respuesta incluye la información que has solicitado y algunos detalles adicionales sobre ella.

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Códigos de estado HTTP - El apretón de manos digital

Cada respuesta viene acompañada de un código que te indica cómo ha ido todo. Éstos son algunos de los que puede encontrar:

200 OK: Todo ha ido bien.

201 Creado: Se ha creado algo nuevo.

400 Solicitud incorrecta: Uh-oh, algo estaba mal en su solicitud.

404 No encontrado: Lo que querías no está ahí.

500 Error interno del servidor: Algo ha fallado en el otro programa.

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Encabezados en las respuestas - Información extra, otra vez:

Al igual que en las peticiones, las respuestas vienen con cabeceras. Pueden decir cosas como "Aquí está la información que querías" o "Te lo envío en este formato".

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Cuerpo de la respuesta - El regalo digital

El cuerpo de la respuesta es donde está lo bueno: la información real que solicitaste. Puede estar en diferentes formatos, como JSON o XML, dependiendo de lo que hayas solicitado.

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Solicitud

Envíe una solicitud GET con la URL que apunta al servicio meteorológico y la ubicación de la que desea obtener información.

GET https://weather-api.com/current?location=cityname

Puedes añadir una cabecera que diga: "Quiero la respuesta en JSON".

Aceptar: application/json

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Respuesta:

"El servicio meteorológico responde con un código de estado 200 OK, diciendo: "¡Genial, tu solicitud se ha realizado correctamente!".

{ 

"temperature": 25,

  "condition": "Sunny",

  "humidity": 60

}

• El cuerpo de la respuesta es como desenvolver un regalo digital: es la información meteorológica que querías.

Conclusión

En el gran mundo de las API, las solicitudes y las respuestas son los interlocutores. Las solicitudes llaman a las puertas digitales, pidiendo cosas amablemente, y las respuestas abren esas puertas, compartiendo la información solicitada. Con métodos, URLs, cabeceras y códigos de estado, las APIs se aseguran de que diferentes programas informáticos puedan trabajar juntos sin problemas.

Así que, cuando te adentres en el apasionante mundo de las API, recuerda que las peticiones y las respuestas son como el abecedario. Ya sea para pedir datos meteorológicos, consultar el correo electrónico o hacer cualquier otra cosa, comprender estos conceptos básicos le ayudará a hablar el lenguaje de las API y a hacer que ocurran cosas increíbles en el ámbito digital.